
El Congreso euroafricano de Benghazi sobre migración en el Mediterráneo se fortalece en Málaga
Se ha celebrado en Málaga una jornada de trabajo de intercambio de ideas, por parte de la sociedad civil, para la búsqueda de soluciones a los actuales procesos migratorios en el Mediterráneo.



También cada 9 de mayo nos detenemos a valorar las realizaciones concretas de esa idea: las libertades del mercado común, el despegue económico acompañado del desarrollo del Estado de bienestar, la incorporación de nuevos socios que - como España y Portugal reinstauramos la democracia de la mano del europeísmo, la ciudadanía europea, la moneda única, la política exterior y de seguridad común, el espacio de libertad, seguridad y justicia, la reconstrucción de la casa común tras la guerra fría. Un Parlamento Europeo en el que estamos representados todos los ciudadanos y un Tribunal de Justicia que vela por nuestros derechos, principios y valores. La tarea está inacabada, y siempre es perfectible. Solo las generaciones venideras establecerán los límites de la integración europea, pero en nuestra parte del planeta hemos conseguido avances políticos y sociales de los que podemos sentirnos orgullosos. Una comunidad de valores, y un modelo para el nuevo mundo que está tomando forma: un ejemplo de cómo los países pueden vivir juntos en paz, construir una solidaridad social y transfronteriza y proteger los derechos humanos, el estado de derecho y las libertades fundamentales.
Tomando impulso en el pasado y pensando en el futuro, la UE no se puede construir sin atender lo que los ciudadanos necesitan. Vivimos momentos complicados, ante los que la UE ha demostrado que puede ser útil y eficaz incluso con las escasas herramientas que tiene. ¿Qué hubiera ocurrido de no existir la UE? Igual que se hizo en 1950, ahora es el momento de "pensar en grande", y el futuro de la UE está en las manos de los ciudadanos. Tras una fase de desafección después de 70 años de éxito, el proceso de integración europea proseguirá sólo si los ciudadanos nos implicamos porque consideramos que la UE se ocupa de nosotros y da soluciones a nuestros problemas, siendo conscientes de que no podemos pedir a la UE que actúe más allá de sus competencias.
















