Los demócratas aseguran haber “corroborado las pruebas” del soborno de Trump  

El bloque demócrata dio otro paso adelante hacia la posible destitución de Donald Trump de la Casa Blanca: la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, aseguró ayer que la primera audiencia pública en la investigación contra el presidente estadounidense “corroboró las pruebas de un soborno” cometido por el mandatario al condicionar la ayuda militar a Ucrania a favores de interés personal.

”El devastador testimonio corroboró las pruebas de un soborno descubiertas durante la investigación y confirmó que el presidente abusó de su poder y violó el juramento de su cargo al amenazar con retener la ayuda militar” a Ucrania, dijo Pelosi en una rueda de prensa.

Según informó La Vanguardia, consultada a qué se refería con la palabra “soborno”, Pelosi respondió que “a la concesión o retención de asistencia militar a cambio de una declaración pública (por parte de Ucrania) sobre una investigación falsa de las elecciones” estadounidenses en 2016 o del ex vicepresidente Joe Biden. ”Eso es un soborno”, insistió la líder demócrata.

Varios testigos convocados en la pesquisa de la Cámara Baja para someter a un juicio político a Trump han asegurado que la Casa Blanca condicionó la entrega de 400 millones de dólares en ayuda militar a Ucrania a que ese país se comprometiera a investigar a los demócratas o a Biden, acusación que el mandatario niega.

Pelosi también afirmó que lo que se ha descubierto sobre Trump hasta ahora en la investigación demócrata “hace que lo que hizo (el expresidente Richard) Nixon parezca casi insignificante”, en referencia al escándalo Watergate que desembocó en la dimisión de ese mandatario en 1974.

La primera audiencia pública y televisada en la investigación sobre Trump la protagonizaron este miércoles el embajador interino de EE.UU. en Ucrania, Bill Taylor, y un subsecretario de Estado adjunto responsable de la política hacia ese país, George Kent.

Taylor aseguró que Trump priorizó sus intereses políticos en la relación con el Gobierno de Ucrania, y que al mandatario le importaba mucho más la posibilidad de que ese país investigara a Biden que la política exterior estadounidense en ese país.