Las cortinas antimoscas son una gran solución para evitar la presencia de moscas y otros insectos, pero no es esta su única utilidad. Son elementos versátiles y de lo más funcionales. Soluciones económicas y efectivas. Atención a qué son, para qué sirven y cómo se instalan. Te contamos más sobre las cortinas antimoscas.
Tipos de cortinas antimoscas para puertas
Cuando hablamos de cortinas antimoscas, probablemente, todos pensemos en las clásicas de PVC hechas con tiras. Sin embargo, este elemento no es el único. Existen, en la actualidad, diferentes modelos entre los que elegir, aunque las de plástico siguen siendo las preferidas por la mayoría.
De aluminio, de plástico, de madera o de bambú son algunas de las opciones a la hora de comprar unas cortinas antimoscas. Cada cortina antimoscas cuenta con sus ventajas e inconvenientes, a pesar de que todas tienen un denominador común: están pensadas para dificultar la entrada de los insectos, sin necesidad de cerrar una puerta.
Cortinas metálicas
El material más utilizado o habitual en estas cortinas antimoscas es el aluminio. La ligereza de las cortinas y la resistencia serán, por lo tanto, sus cualidades principales.
Las persianas de aluminio, ya sean de eslabones simples o dobles, se pueden personalizar. Es una posibilidad que proporciona cierta ventaja a estas cortinas antimoscas, perfectamente adaptables a huecos que no tienen medidas estándar. Además, existe la opción de elegir entre varios colores e, incluso, combinarlos en una misma cortina. Son unas de las cortinas para puertas antimoscas favoritas de quienes dan suma importancia a la ventilación y al paso de la luz por las puertas donde van a ser instaladas.
Cortinas de tiras de PVC
Como ya te hemos adelantado, se trata de uno de los tipos más populares. Una de las razones de tal fama es la resistencia de este material, así como la versatilidad de los modelos de cortinas antimoscas para puertas fabricadas en PVC. De colores, de tiras de diferentes formas, transparentes, etc. Es uno de los modelos de cortinas más resistentes a las inclemencias del tiempo. Un aspecto que, teniendo en cuenta que se suelen colocar en exterior, es uno de los más relevantes. Todo ello sumado al hecho de que son los modelos de cortinas antimoscas más económicos que existen en el mercado.
¿Cómo medir cortinas antimoscas?
Uno de los fallos más frecuentes que se presentan con estas cortinas antimoscas y el resto, en general, tiene que ver con la medición. No siempre medimos bien. Es un aspecto que afecta en la elección posterior y el hecho de que no hayamos escogido bien el modelo de cortina por sus dimensiones. La mejor manera de evitar esto es sabiendo cómo medir. No dejando nada al azar.
Lo primero que tienes que tener en cuenta a la hora de medir es que estas cortinas antimoscas se puede instalar por dentro o por fuera del hueco. Ambas medidas no tienen por qué coincidir. Es por esto que, en primer lugar, tendrás que decidir en qué lugar y de qué forma van a ir colocadas. Una vez tengas claro si van dentro o fuera del hueco, es el momento de coger un metro.
Si van por dentro del hueco, tendrás que medir la anchura de ese hueco y el alto. A ambas medidas tendrás que restarles un centímetro. Si, por el contrario, van por fuera del hueco, solo tendrás que medir la anchura y añadir un par de centímetros o tres por cada uno de los lados. Esto es para que tape bien la puerta. Respecto del largo, a la medida has de restarle también un centímetro. La razón, al igual que en el anterior caso, no es otra que conseguir que las cortinas no arrastren. Es preferible que se queden a un centímetro del suelo.
¿Cómo instalar cortinas antimoscas?
La colocación de las cortinas antimoscas, una vez tengas las medidas, es bastante sencilla. Lo primero que tendrás que hacer es marcar los puntos donde vas a hacer los taladros. Para ello, tendrás que medir donde van las sujeciones del modelo que vayas a instalar. Tendrás que trasladar esa misma medida al lugar de la instalación.
Hacer un taladro para, posteriormente, meter un taco será el paso previo de esta instalación para la que se requieren pocos utensilios o herramientas y conocimientos muy básicos. Normalmente, en cada cortina se incluyen los accesorios necesarios para esa instalación. Comprueba el grosor del taco para la elección de la broca.
También tendrás que elegir el tipo de broca, dependiendo del material donde vayas a colgar la cortina. Debes tener en cuenta que no es lo mismo taladrar madera que aluminio o una pared.
¿Qué es una cortina antimoscas?
Una cortina antimoscas es un dispositivo fabricado con diversos materiales y un único fin: proteger tu inmueble de los insectos sin renunciar a la ventilación o la luz. Podrás tener abierta una puerta sin temer la entrada masiva de moscas, mosquitos o cualquier otro insecto. Son, por todo ello, unos dispositivos para repeler insectos de lo más rudimentario. Una solución sostenible que no va a dañar el medio ambiente.
Las cortinas antimoscas de exterior están pensadas para este fin sin tener que limitar la ventilación de tu casa o cualquier inmueble, especialmente, en los meses de más calor. Son una manera sencilla de acabar con este problema, pero también de dar sombra a una puerta sin que eso signifique que no corra el aire.
Las cortinas antimoscas, también conocidas como cortinas para moscas, además de su utilidad principal, tienen un uso estético. Podrás añadir un plus de belleza a una zona de paso, dividir espacios o dotar a una estancia de cierta privacidad. No obstante, la mejora en la eficiencia energética es otro de los factores o beneficios más relevantes de la instalación de esta clase de elementos. Es paradójico cómo algo tan rudimentario y básico puede suponer tanto en este aspecto. Las transparentes o las de aluminio son las mejores opciones para aprovechar la luz, al tiempo que protegemos los espacios de ciertas temperaturas.