Podemos admite que el giro de Casado obliga a modificar el discurso que identificaba al PP con Vox

Podemos reconoce que el giro escenificado este jueves por el presidente del PP, Pablo Casado, desmarcándose explícitamente de Vox, obligará a modificar el discurso que venía identificando a ambos partidos, de cuya unión el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, llegó a decir hace dos semanas que era "pegamento para los demócratas", en referencia a la mayoría de la investidura.

Fuentes del entorno de Iglesias confesaron a Servimedia que el vicepresidente tuvo que modificar en el último momento el sentido de su intervención en el debate parlamentario de la moción de censura de Vox, una vez que Casado anunció que votaría con un 'no' y, sobre todo, tas marcar expresamente distancias con el partido de Santiago Abascal, al que presentó como aliado tácito del Gobierno por la polarización que alimenta a ambos.

Según las fuentes consultadas, en la reunión de maitines del Ejecutivo el lunes pasado fue cuando se acordó que el presidente, Pedro Sánchez, replicaría a Abascal y que Iglesias lo haría a Casado. Todo ello, apuntaron, con el objeto de "diversificar los mensajes" y escenificar que hay un Gobierno de coalición con dos partidos distintos.

El vicepresidente, al final, tuvo que improvisar un contenido y sobre todo un tono distinto para su contestación al líder del PP, a quien llegó a felicitar por haberse desmarcado de Vox. Le reconoció haber hecho “un discurso político brillante”, en la “tradición de la derecha española más inteligente”, la de Antonio Cánovas del Castillo.

No obstante, para mantener en parte el discurso realizado hasta el momento, le advirtió de que la rectificación "llega tarde" porque ya depende de ese partido para gobernar y además está perdiendo la "batalla cultural" por las ideas de la derecha, "un atolladero del que no van a poder salir". Sobre todo porque los países europeos no admitirán que el PP vuelva al Gobierno si es con el apoyo y la influencia de Vox.

En cualquier caso, antes de imprimir un cambio al discurso sobre "la extrema derecha y la derecha extrema", otra representante de Unidas Podemos en el Gobierno observó al PP que "el movimiento se demuestra andando", dando a entender que todavía tendrá que probar con hechos concretos su eventual alejamiento de Vox.

Para ella, el Gobierno de coalición "sale reforzado" de la moción de censura, para empezar de cara a los Presupuestos, por lo que el "pegamento", en palabras de Iglesias, que hasta ahora suponía la alianza de PP y Vox para mantener unidos a los partidos de la mayoría de investidura, seguirá sirviendo de aglutinante, aunque lo aporte ahora en exclusiva el partido de Abascal. "Nos han hecho un gran favor", sentenció irónicamente sobre la iniciativa de Vox.
(SERVIMEDIA)