¿Qué es la legionella y por qué es tan peligrosa?

La legionella es la bacteria responsable de la temida legionelosis. Se trata de una neumonía que varía en gravedad según la evolución que tenga en el paciente, pudiendo llegar a ser mortal en los casos más extremos. Su diagnóstico es complicado, pues los síntomas que se presentan coinciden con los de cualquier infección respiratoria. Para identificar a esta bacteria, se necesitan pruebas específicas de laboratorio, por lo que la detección de la enfermedad suele ser tardía.

Focos de infección de legionella

La legionela es una enfermedad contagiosa, no de persona a persona, sino que se localiza en un foco de infección en el que prolifera e infecta el pulmón de los humanos. Si no se toman las medidas de prevención adecuadas, las colonias de legionella aparecen y contagian a las personas. Si el paciente es de edad avanzada, no cuenta con un sistema inmunitario fuerte o sufre de problemas respiratorios previos, la neumonía puede complicarse y causarle la muerte.

¿Dónde aparece esta bacteria?

La legionella pertenece a la familia de Legionellaceae, que cuenta con unas treinta especies. La Legionella pneumphila es el tipo que causa más del 90% de las infecciones. Habita en las zonas con agua, como ríos o lagos, pero también se localiza en los sistemas de suministro y distribución de agua y en los aires acondicionados, colonizando las redes de distribución de los edificios y penetrando en el sistema respiratorio de las personas.

Esta bacteria suele habitar en espacios donde hay abundante humedad, como pueden ser bañeras, duchas, piscinas, spas y fuentes termales. Otro foco común de infección son los sistemas de refrigeración, entre los que se encuentran los aires acondicionados, a los que ya se ha hecho referencia, pero también los humidificadores, los sistemas de calentamiento de aguas y las torres de refrigeración.

También aparece en aguas estancadas al aire libre, como la que se encuentra en arroyos, charcos o pozos.

Aunque se trata de una bacteria que puede desarrollarse en cualquier época del año, se reproduce con facilidad en los meses de calor, a temperaturas que varían entre los 25 y los 40 grados. Son, por tanto, los meses de primavera y verano en los que se localizan más brotes.

¿Cómo controlar la legionella?

Pineda Servicios Integrados es una empresa referente en el sector de control de plagas, desinfecciones y limpiezas profesionales que presta servicios en toda España. Con la ayuda de estos profesionales y la aplicación de un tratamiento legionella, cualquier foco de infección quedará totalmente controlado.

Cuando hay sospecha de cualquier tipo de infección por bacteria o algún tipo de plaga, no hay que dudar y solo confiar en los expertos en este tema antes de que el mal llegue a mayores. Así mismo, realizar las revisiones periódicas en las instalaciones de los conductos del aire acondicionado, entre otros, evitará que se dé este tipo de colonias de bacterias infecciosas.

Trucos para prevenir y detener la propagación de la legionella

El tratamiento de legionella se realiza con un proceso de desinfección de la zona afectada. Las medidas de prevención de carácter profesional se llevan a cabo con controles y siguiendo la normativa UNE 100-030-94 “Guía para la prevención de la legionella en las instalaciones”.

Entre las acciones de mantenimiento para prevenirla, hay que realizar un sistema de limpieza específico, drenando la zona y eliminado el sustrato biológico que alimenta la bacteria.

A nivel particular, estos son algunos trucos y recomendaciones a seguir para prevenir la legionella en las instalaciones.

Eliminación de la legionella en espacios particulares

En primer lugar, se debe evitar cualquier posibilidad de estancamiento del agua. Eso se consigue con un buen diseño de las instalaciones. En segundo lugar, hay que llevar a cabo un programa de mantenimiento para eliminar las zonas sucias. En tercer lugar, hay que impedir la supervivencia de la bacteria en la instalación. Para lograrlo, se debe vigilar la temperatura del agua y desinfectar las instalaciones de manera continuada.

Los propietarios de edificios comerciales se tienen que tomar en serio todas las medidas de higiene y de control para evitar que aparezca esta bacteria. Es de vital importancia contar con el servicio de profesionales que hayan obtenido el carné de control de legionella para que el establecimiento cumpla con la normativa y no ponga en peligro la salud de los usuarios.

En caso de no cumplir con la normativa, pueden aparecer casos de legionella asociados a un foco de en un local comercial por una mala gestión en el control de plagas. Las consecuencias pueden ser nefastas para la organización, enfrentarse a una demanda contra la salud pública e incluso terminar con el cierre del negocio por negligencia.